Los barrios obreros de Sevilla se movilizaron el pasado 3 de octubre convocados por Barrios Hartos, Marea Blanca y Marea Verde. A pesar de las condiciones de cierta prudencia ante la amenaza que supone la nueva oleada de contagios por la pandemia, varios miles de personas, conscientes de la gravedad que ello representa, se movilizaron y alzaron su voz, dando en todo momento muestras del máximo respeto a las medidas de seguridad requeridas.

La pandemia empeora en la capital. Ha vuelto a ser el epicentro del virus no solo en el Estado español sino en toda Europa. Tras muchos vaivenes y tensiones entre los gobiernos central y autonómico, finalmente el gobierno de Ayuso ha decidido acatar la decisión del Ministerio de Sanidad de confinar toda la capital. Ahora, la CGT anuncia una huelga general contra la desastrosa gestión de Ayuso de esta epidemia.

La dirección de Adecco despidió en pleno proceso electoral a 3 compañeros candidatos en la lista del SAT para las elecciones del 30 de septiembre, para boicotear nuestra candidatura. Desde entonces esta sección sindical no ha dejado de denunciar que estos despidos suponen una vulneración de nuestros derechos más básicos: el derecho a presentarnos a unas elecciones sindicales y el derecho a votar libremente a la candidatura que queramos.

QUE EL PRESIDENT DE LA GENERALITAT LO ELIJA EL PUEBLO CATALÁN Y NO LA CASTA JUDICIAL DEL RÉGIMEN MONÁRQUICO QUE ESCAPA A TODO CONTROL POPULAR  - Con la inhabilitación efectiva de Quim Torra, el aparato del Estado español vuelve a pisotear desvergonzadamente los derechos democráticos del pueblo catalán. Todos los demócratas en general, y los revolucionarios en particular, tenemos la obligación de posicionarnos contra este ataque.

La privatización de Bankia a favor de CaixaBank es un regalo escandaloso a la oligarquía financiera española, a través de una absorción que le saldrá prácticamente gratis a la entidad catalana, un firme baluarte del Ibex35 y del unionismo españolista. A fines de 2017, CaixaBank trasladó su sede central de Barcelona a Valencia, como una forma de presionar contra el Procés.

Con la inhabilitación efectiva de Quim Torra, el Estado español vuelve a pisotear desvergonzadamente los derechos democráticos del pueblo catalán. Todos los demócratas en general y los revolucionarios en particular tenemos la obligación de responder a este ataque movilizándonos en las calles.

Es evidente que los virus y las enfermedades no discriminan por clase social por lo que nadie está libre de padecer cualquier afección en cualquier momento de su vida. Sin embargo, las posibilidades de mitigar los riesgos de la enfermedad o minimizar sus consecuencias si son una cuestión de clase. Y en el caso del Covid-19 en Madrid esto es algo que se observa claramente en función del nivel de renta de cada barrio.