Intérpretes de lengua de signos de la Educación Pública Andaluza: un nuevo colectivo entra por primera vez en lucha

Entre esas dos fechas se han sucedido decenas de reuniones y concentraciones, empezando en Málaga, donde en un primer momento la movilización alcanzó un mayor grado de cohesión y organización. Desde Málaga se propuso a mediados de mayo un plan de lucha al conjunto de la región, al que se fue incorporando progresivamente las compañeras del resto de provincias.

Hablamos de compañeras porque este colectivo es femenino en su inmensa mayoría, siendo muchas de las trabajadoras madres de familia.

En los últimos años hubo amagos de protesta, dirigiéndose algunas trabajadoras a diferentes sindicatos de clase. Los dirigentes de éstos, increíblemente, en vez de poner las bases para organizar una respuesta colectiva, las desviaron hacia reclamaciones judiciales individuales que no tuvieron ningún efecto a la hora de organizarlas en lo sucesivo como colectivo. Semejante línea de actuación, en los hechos, no impidió que perdieran unos 400 euros de capacidad adquisitiva en los últimos años.

Esto último ha sido propiciado directamente por los recortes de los diferentes gobiernos que se sucedieron en la Junta de Andalucía en los últimos años, que vendían a empresas privadas la concesión de este servicio en los institutos de enseñanza secundaria. Así, en la última convocatoria hace dos años, la Junta "subastó" a las trabajadoras al mejor postor que pagase por ellas, como mucho, "hasta 18 euros". El "negrero" de turno fue la empresa SEPROTEC, que pagó poco más de 12 euros por hora trabajada, del que llega finalmente a las intérpretes poco más de 6 entre salario base y complementos.

Es decir, la Junta de Andalucía promovió y promueve el que las empresas subcontratadas con dinero público exploten progresivamente cada vez más a las trabajadoras. Para ello la empresa utiliza cualquier argucia legal mientras la administración pública mira para otro lado. Así, a las trabajadoras se les aplica ¡¡el convenio de "Oficinas y Despachos de Madrid", que no tiene nada que ver con su profesión, mientras el convenio específico que les corresponde, el de "Atención a personas con Discapacidad" es ignorado en la relación contractual porque sí recoge más derechos!!

Qué cambió este curso

En cualquier caso, estas protestas sirvieron para tejer contactos en toda la comunidad que se mantuvieron hasta ahora.

Este curso, el conocimiento de la situación laboral por una sindicalista marxista en Málaga propició la organización del movimiento a un nivel mucho mayor. Son las ideas y unos métodos determinados, no las personas, las que sustentan la base de la organización de esta lucha, en este caso dando énfasis en dar confianza al conjunto de trabajadoras en sus fuerzas, en su capacidad de organización y lucha.

Explicamos también cómo la línea entre la lucha política y sindical es muy delgada. La Junta pretende centrar el problema en la empresa privada subcontratada (a su vez, a través de otra empresa pública que regula todos los sectores externalizados-privatizados de la Consejería, lo que incentiva aún más la opacidad de la utilización del dinero público).

Esta opacidad, este "dejar hacer" ha significado que nadie ha controlado a SEPROTEC mientras ha durado el convenio.

Nosotros, ahora que se va a renegociar el convenio este verano, insistimos en una idea: ¿hay que realizar una lucha sindical cada 2 años que se aprueba la nueva licitación? NO. Aquí la responsable es la Consejería de Educación, que hace que el alumnado sordo de la Escuela Pública Andaluza sea atendido por personal cualificado que está siendo exprimido en sus condiciones laborales por el afán de ganancia de la empresa privada, lo que degrada el servicio prestado.

Por tanto, independientemente de las denuncias que consideremos hacer contra la empresa por su trato indebido y que darán lugar a juicios que verán la luz dentro de muchos, muchos meses, pedimos negociar ya directamente con la Consejería de Educación el nuevo "Pliego de Condiciones" que regulará las condiciones laborales de las trabajadoras ya a partir del próximo Septiembre. En segunda instancia queremos abrir una mesa de negociación para conseguir el paso a personal laboral de la Consejería de Educación de las trabajadoras, tal como prometió verbalmente la Consejería en el 2007.

Así, las reivindicaciones más importantes son:

- Jornada laboral completa

- Salario base digno (actualmente no llega a 700 euros)

- Contratación por el curso escolar completo, a través de una bolsa de empleo pública.

- Establecer por convenio la categoría profesional tres para estas profesionales

- Reconocimiento como personal laboral de la Junta de Andalucía.

Por todo ello, hoy miércoles 17 de junio volveremos a las puertas de las delegaciones de Educación puesto que, hasta la fecha, la Junta de Andalucía no ha respondido a nuestra petición de reunión intentando ignorarnos.

Como dijimos, ya la semana pasada la movilización consiguió extenderse al conjunto de la región. Aquí puedes ver el conflicto, ya con concentraciones simultáneas en las ocho provincias andaluzas, transmitido la semana pasada en directo a través de CANAL SUR:

Asimismo, desde la asamblea regional constituida el 13 de junio pedimos el apoyo a los diferentes partidos políticos, sindicatos y movimientos sociales que quieran solidarizarse con nuestra lucha, tal como ya hemos obtenido, lo que se anuncia en la WEB que para esta movilización han creado las trabajadoras.

Ya tuvimos una primera reunión con el parlamentario regional de PODEMOS, Jesús Rodríguez, que también ha solicitado infructuosamente una reunión con la viceconsejera de educación.

Ayer, martes 16 de Junio, Teresa Rodríguez, Secretaria General de Podemos Andalucía se reunió nuevamente con las trabajadoras y, en rueda de prensa, criticó el desaire que está realizando la Junta a las trabajadoras en este sentido. De seguir así, las trabajadoras están dispuestas a llegar hasta donde haga falta. Sobre la mesa ya se ha planteado después de estas próximas concentraciones realizar una MARCHA A SEVILLA por parte de las trabajadoras y colectivos que las apoyan.

Sabemos que esta lucha va a significar un antes y un después para este colectivo, que ha madurado: ha vivido el papel de la policía y la ilegalización de sus concentraciones; la perfidia de la administración pública vendida a intereses empresariales; la necesidad de confiar en el resto de las compañeras para sacar adelante la lucha, en un colectivo muy dividido por cuestiones profesionales; el cómo es imprescindible delegar tareas para organizar la lucha, rindiendo cuentas a la Asamblea de trabajadoras, que es quien aprueba la marcha general del conflicto.

Muchas ya comprenden cómo, en el fondo, nuestra lucha es una pequeña parte de UNA que las engloba a todas y ante la que hay que tomar partido inexcusable: la de toda la clase trabajadora contra este sistema que defiende a los grandes empresarios y machaca a los trabajadores.