Arte y cultura
Typography
  • Smaller Small Medium Big Bigger
  • Default Helvetica Segoe Georgia Times

El sábado 29 de enero tuvo lugar la sesión final del Benidorm Fest, el festival de música que RTVE ha organizado como preselección para elegir la candidatura de España para el próximo festival de Eurovisión, que se celebrará en Turín del 10 al 14 de mayo de este año.

Chanel Terreiro, con su tema Smolo, se proclamó ganadora de este festival e inmediatamente las redes se llenaron de una enorme indignación. Tal ha sido la fuerza de las críticas que RTVE se ha visto obligado a sacar un comunicado pidiendo apoyo para la representante a Eurovisión y Unidas Podemos va a presentar varias preguntas en el Congreso de los Diputados sobre el cumplimiento de las bases del festival. 

Hacía tiempo que los seguidores de Eurovisión pedían una preselección con candidaturas de nivel, para salir de los últimos puestos de la clasificación del festival a la que España ha estado relegada en los últimos años. Parecía que RTVE había escuchado a los eurofans y había organizado una preselección acorde a las demandas del público pero ello no evitó las acusaciones de tongo por parte de los televidentes.

Desde que RTVE anunció el formato de la preselección, los candidatos y los temas participantes,  comenzó una gran expectación, convirtiéndose en todo un fenómeno. Desde el principio, había dos grandes favoritas: el grupo Tanxugueiras con su tema Terra, una canción en gallego y en la que tienen presencia todas las lenguas cooficiales del Estado Español, y Rigoberta Bandini, con Ay mamá. Dos canciones muy buenas en lo musical, con autoría de las propias candidatas y con un toque reivindicativo, ambas colocando a la mujer como protagonista del cambio social.

Para entender la polémica hay que conocer el sistema de votación. En primer lugar, participaba un jurado formado por 5 profesionales de la industria musical, que tenían el 50% del voto. Además de ello, había un jurado demoscópico, formado por 350 personas divididas entre hombres y mujeres y en dos grupos de edad: de 18 a 44 años y de 45 años en adelante, una selección encargada a la empresa de investigación de mercados IPSOS. Finalmente el otro 25% del voto correspondía a los espectadores a través de sms.

Ya en la primera semifinal, en la que participaba el grupo Tanxugueiras, se escucharon los primeros silbidos y abucheos al jurado profesional, no solo porque diera la máxima puntuación a Chanel Terreiro, la candidatura en la que la industria musical había hecho una apuesta fuerte con un tema reguetonero de temática superficial donde el papel de la mujer no va más allá de ser un mero objeto sexual a disposición de hombres con dinero, también porqué colocó Tanxugueiras en un sorprendente puesto 5ª de 6, lo cual le complicaba la clasificación para la final del sábado. No obstante, gracias al voto demoscópico y al televoto las gallegas consiguieron pasar a la final en segunda posición con 93 votos tras Chanel, que mantuvo la primera plaza, con 110 votos. 

En la segunda semifinal hubo menos sorpresas, siendo la ganadora de la misma la otra favorita, Rigoberta Bandini, obteniendo la máxima puntuación tanto en el jurado profesional y el televoto y la segunda posición del voto demoscópico. Ya en redes muchos seguidores daban por hecho que el voto del jurado profesional sería un lastre para Tanxugueiras, y empezaron a ver con más opciones a Rigoberta Bandini, muchos de ellos incluso cambiaron su voto al ver a Bandini como el “voto útil”. 

En la final el sistema de votación se mantuvo. El jurado volvió a colocar a Tanxugueiras en el puesto 5º de 8, a Rigoberta en segunda posición y otorgaron la máxima puntuación a Chanel. Por su parte, el jurado demoscópico dio la primera posición a Tanxugueiras, la segunda posición a Chanel y la tercera a Rigoberta; y el público a través del televoto, dio la primera plaza a Tanxugueiras, la segunda a Rigoberta y la tercera a Chanel. Con estos resultados, la suma de las votaciones dio la victoria a Chanel, seguida de Rigoberta Bandini y Tanxugueiras.

Las redes sociales estallaron, llenándose de mensajes acusadores de tongo dirigidos a RTVE. No es para menos, el lema “el festival que tú quieres” y que generó tantas expectativas se quedó en lo de siempre: RTVE a través de su jurado profesional tuvo la última palabra en cuanto a la elección del representante a Eurovisión. Y ¿qué decidieron? Indudablemente se decantaron por llevar a la candidatura creada por una gran discográfica (BMG) que ha invertido todo cuanto ha hecho falta para construir este producto musical, contando para ello con autores, productores y coreógrafos internacionales. 

De nada ha servido que el público se decantara por temas con mayor personalidad, con trasfondo reivindicativo, creados desde cero por las propias candidatas y financiados con sus propios recursos. Desde el punto de vista de RTVE, el público no está capacitado para seleccionar libremente al representante para Eurovisión, y es por ello que introducen el elemento del jurado profesional para “corregir” el voto del público y proclamar ganadora a la candidatura que RTVE quería, la candidatura de la industria musical.

Muchos en la izquierda han criticado la implicación del BNG y la rama gallega de UP en la polémica, así como la de CCOO y UGT, que han demandado que se anule el resultado del festival, con el argumento de se trata de una simple escaramuza cultural sin relación con las preocupaciones cotidianas de la clase trabajadora. Evidentemente los marxistas no compartimos el énfasis en las cuestiones culturales y simbólicas en el que el reformismo y buena parte del activismo caen ante la ausencia de una verdadera alternativa de transformación social, pero tampoco negamos la importancia de lo simbólico y lo cultural en la lucha de clases. 

Puedes enviarnos tus comentarios y opiniones sobre este u otro artículo a: [email protected]

Para conocer más de “Lucha de Clases”, entra a este enlace

Si puedes hacer una donación para ayudarnos a mantener nuestra actividad pulsa aquí