Boris Johnson anunció su acuerdo de Brexit con gran fanfarria, prometiendo un futuro brillante de prosperidad y libertad. Pero se están acumulando nubes oscuras para el capitalismo británico, que se enfrenta a una tormenta perfecta. Hay que poner fin a este podrido gobierno conservador.

Las imágenes de la paliza a Michel Zecler el 21 de noviembre y el gran éxito de la "Marcha por las Libertad" del sábado siguiente profundizaron la crisis del gobierno. Macron expresó públicamente su "vergüenza", exigió una "fuerza policial ejemplar" y nos informó que el Palacio del Elíseo había contactado con Michel Zecler para asegurarle su simpatía.

Una segunda ola de COVID-19 está haciendo estragos en Europa. Esto no fue inevitable, sino una consecuencia mortal de los gobiernos que priorizaron la riqueza de los capitalistas sobre la salud de la población. Nosotros decimos: ¡que paguen los  patrones para proteger las vidas y los medios de vida! Para luchar contra el virus, ¡abolir el capitalismo!

El asesinato de Samuel Paty el viernes 9 de octubre generó una ola de indignación en todo el país. Es la primera vez que un ataque de estas características se lleva a cabo contra un profesor. El personal educativo se encuentra en estado de shock, dividido entre el malestar, la ansiedad y la ira.

Al suspender a Jeremy Corbyn, el ala derecha laborista ha lanzado el guante. Se está llevando a cabo una caza de brujas para purgar a la izquierda y hacer del Laborismo un partido fiable para los grandes negocios. La izquierda debe movilizarse y luchar con valentía.

Los tribunales griegos han condenado a los dirigentes de la organización fascista Amanecer Dorado por una serie de ataques asesinos. Este fue el resultado directo de la presión ejercida sobre la burguesía por parte de los trabajadores y la juventud, que son la única fuerza que puede oponerse a la amenaza del fascismo.