El inicio del curso escolar está marcado por la incertidumbre a consecuencia del rebrote de la epidemia de coronavirus y la negligencia de todas las administraciones del Estado, central y autonómicas, en planificar conjuntamente medidas de seguridad y de adaptación de espacios, protocolos y currículos, para alumnos y profesores.

El gobierno de derechas de la Junta de Andalucía está lanzando un ataque sin precedentes contra las universidades públicas de la comunidad mediante recortes en su financiación, que amenazan el acceso a la enseñanza superior y miles de puestos de trabajo. En este artículo, explicamos cómo se están llevando a cabo estos recortes y la necesidad de una movilización unitaria para hacerles frente.

El 14 de marzo iniciamos un periodo de confinamiento del que conocíamos la fecha de inicio pero no la fecha de finalización. El viernes anterior, alumnado y profesorado dejamos los centros de forma sorpresiva sin poder planificar ni coordinar el seguimiento de las clases y con la incertidumbre creada por una situación nunca vivida hasta ahora por nuestra generación.

Desde hace algo más de un año, los compañeros de Lucha de Clases organizamos los Comités de Lucha Estudiantil (CLE), que tuvieron su origen en Antequera (Málaga), en la huelga estudiantil del 8M de 2019. Desde entonces, hemos consolidado esta plataforma en los tres institutos públicos de la ciudad, y en otras ciudades.

Yo y mis camaradas hemos creado en nuestro centro el Comité de Lucha Estudiantil. Está integrado por 13 personas. En nuestro centro hay una periferia muy interesante de alumnos con inquietudes y consciencia de que el mundo no está estructurado como debería. Nuestra tarea es introducirlos en la vida política y al marxismo.

El gobierno anunció el 15 de abril que el tercer trimestre del curso escolar se dedicaría a actividades de refuerzo educativo. Igualmente, aconsejó a las autoridades educativas que la norma en las evaluaciones de final de curso sea el promocionar de curso, salvo en caso “muy excepcionales”. Esta apuesta por una mayor “comprensividad” es muy positiva. Ahora bien, creemos que hay algunas debilidades en la norma aprobada.

La izquierda debe legislar claramente para revertir la privatización desarrollada en todo el Estado - Decenas de miles de manifestantes salieron a las calles andaluzas el miércoles 4 de marzo para defender la enseñanza pública, en el día de huelga convocado por la Plataforma de la Enseñanza Pública a la que se sumaron el resto de sindicatos docentes.